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Argentina y Rusia refuerzan relación bilateral

Los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y la Federación Rusa, Dmitri Medvedev, reforzaron su "asociación estratégica´ con la firma de una declaración conjunta y 13 acuerdos por los que, entre otras cosas, Buenos Aires adquiere helicópteros Mi-17 y recibirá inversiones y asesoramiento en materia de energía nuclear y tecnología de satélites de navegación. Entre otros acuerdos, el Gobierno firmó un acuerdo para la adquisición de dos helicópteros Mi-17 E para el para el Ministerio de Defensa de Argentina. No se informó de la cuantía económica de la adquisición ni plazo de entrega. La ministra Nilda Garré ya había anunciado su interés en noviembre de 2008 y desde entonces se han mantenido varias reuniones técnicas y financieras. El Mi-17, adquiridos por otros países de la región como Chile o Ecuador, es un modelo de helicóptero de carga media/pesada, capaz de operar en las más complicadas condiciones meteorológicas y con un alcance de 1.000 kilómetros, lo que le coloca como una opción adecuada para las operaciones en el Antártico. Además, Rusia y Argentina firmaron varios Memorándum de cooperación entre los que destaca uno por el que la agencia espacial rusa Roscosmos y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) de Argentina para las investigaciones con el sistema global de navegación por satélite GLONASS. Al mismo tiempo, la agencia rusa de energía nuclear Rosatom suscribió un protocolo con el Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios sobre cooperación en la utilización de la energía atómica con fines pacíficos. Este acuerdo incluye el desarrollo de la energía nuclear en Argentina, en la construcción de nuevas centrales nucleares en nuestro país y suministro de combustible. La inversión rusa, de miles de millones de dólares según dijo el propio Medvedev, estará vinculada a la construcción de la central nuclear Atucha III en la provincia de Buenos Aires, que se sumaría a las que ya están en funcionamiento, Atucha I y Embalse, y a una tercera (Atucha II) actualmente en obra.El presidente ruso dijo al respecto que "la llegada a la Argentina de la empresa rusa (encargada de esa construcción) traerá como consecuencia varios miles de millones de dólares en bloques energéticos e infraestructura".